11-05-2015

Me besaste el corazón con la mirada
y en ese instante todo cambio para siempre,
acariciaste mi alma con tu sonrisa
y desde entonces tiembla con tu ausencia,
has perfumado mi piel con la promesa de besos fugitivos
cada fibra de mi ser quema y te anhela en silencio,
mi mente te pertenece porque solo sabe añorarte
sueña despierta y entre suspiros te recuerda,
abrazada a tu voz esta mi cuerpo
tus palabras han llegado a lo más íntimo de mi,
mi espíritu inquieto se rebela porque no estas a mi lado
te busca noche y día, incansable,
soy como un naufrago a la deriva
hasta que el horizonte nos funda para siempre...

perdona que huela a cerrado

Perdona que huela a cerrado
hace tiempo que no pasaba por aquí,
siento las telarañas y la capa de polvo
han asado meses desde la última vez,
lamento el desorden, quería venir
pero siempre decía :" quizás mañana"...
parece que este corazón malherido empieza el deshielo
el frío deja paso a una esperanzadora primavera,
vuelve a oírse el rumor sutil de las rimas
se sacan las plumas olvidadas
y se van llenando los cuadernos de nuevos versos,
las emociones perdidas felizmente se reencuentran
late el alma viva de nuevo
ha despertado del invernal letargo al fin,
suenan risas en campanillas cada vez que pienso en ti,
aroma de rosas inunda el ambiente,
un beso mío esta dispuesto a morir
en la orilla de tus labios,
mientras sean tus brazos los que me sostengan
cuando temblando te pregunte:
" ¿ pero tú dónde has estado todos estos años? "